martes, 29 de octubre de 2019

Fe y Razón


Vibración. Nada está inmóvil; todo se mueve; todo vibra.

3er principio hermético del Kybalión


“El hombre es el único ser que se cuestiona su ser.”
Jean-Paul Sartre

Introducción


¿Q
ué tiene que ver la F:.M:. con la Fe y con la Razón? Si se dice que “la Razón piensa y la Fe acata”, entonces es claro que el A:.R:. es el camino de la Razón, pero ¿qué pasa con la Fe? Mientras la F:. M:. S:. es la evolución de los Misterios Menores (“conócete a ti mismo”), la Masonería de Perfección o Capitular es la evolución de los Misterios Mayores. ¿Aquí está encerrada la respuesta a dicha pregunta, o es más simple aún?

Al profundizar en esta investigación llegué hasta más allá del Ter:. Gr:., y pude contemplar aquello que no puedo traducir al lenguaje inteligible, y menos aún a esta H:. y E:. Lo que sí puedo decir, es que efectivamente encontraremos que la respuesta subyace en nuestro emblema masónico de la Escuadra y Compás. En LLog:. Azules, está claro que la Escuadra ha de simbolizar a la Razón, pero al ir más allá de las CCol:. De Hércules, encontraremos que la respuesta a la Fe se encuentra en el Compás, y esto es casi todo lo que puedo decir a esta H:. y E:.



Desarrollo


¿Q
ué se opone a la Fe? La Duda, y en su término más absoluto, la negación[1]. En base a esta idea, podemos afirmar que la razón elimina la duda, logra una afirmación “verdadera” en oposición a la negación. Entonces, a partir del dicho que dice “el enemigo de mi enemigo es mi amigo”, podríamos afirmar que Fe y Razón pueden ser amigas, o que al menos en ningún caso deberían ser enemigas. Pero también podemos observar, que es la duda el inicio del camino de la Fe.

Por otra parte, es evidente que en general somos conscientes de que nuestro accionar ocurre en el mundo material, y aquí la Razón cumple un papel fundamental para ello, pero si no tenemos la voluntad de realizar lo planeado, entonces aquello jamás ocurrirá.  De algún modo, la Fe, de nuestro mundo interior, en que aquello que queremos realizar es realmente posible[2], puede encender nuestra Voluntad que hace falta, y así, de esta forma, Fe y Razón dan cumplimiento a nuestro propio plan. Esto es fantástico, porque implica y explica, cómo nuestro mundo interior influye en el mundo material.

Y así, todo cuadra con el emblema masónico de la Escuadra y el Compás, dónde el primer instrumento simboliza a la Materia y el segundo al Espíritu, tal que en Pri:. Gr:. sólo sabemos que la Materia domina o prevalece sobre el Espíritu, pero no será para siempre. Lamentablemente toda la riqueza que de esto deriva y evoluciona, y que explica perfectamente el título de esta plancha, en esta ocasión no es más que una columna truncada por la H:. y la E:.
                                                                                                   

Definiciones Preliminares


Fe[3]:
1.    Es la primera de las tres virtudes teologales; es una luz y conocimiento sobrenatural, con que sin ver creemos lo que Dios dice y la Iglesia nos propone.
2.    Confianza, buen concepto que se tiene de una persona o cosa.
3.    Creencia que se da a las cosas por la autoridad del que las dice o por la fama pública.

En relación con las tres virtudes teologales ya mencionadas, existe una correspondencia con los tres grandes pilares simbólicos de nuestras Llog:., que son la Sabiduría, la Fuerza y la Belleza[4]. Y sobre la Fe en cuestión, según San Pablo, “es la sustancia de las cosas esperadas y es el estado deseado por el sabio, que ve como la Fe Divina puede conducir a la Realización Divina y que su profesión hecha con todo el corazón y toda la voluntad es el mayor acto de sabiduría que puede ser realizada por el hombre, ya que conduce a toda verdad y al gran fin de ser.”[5]


Razón[6]:
1.    Facultad de discurrir.
2.    Acto de discurrir el entendimiento.
3.    Palabras o frases con que expresa un discurso.
4.    Argumento o demostración que se aduce en apoyo de alguna cosa.
5.    Motivo o causa.

Podemos concluir a partir de estas definiciones que: la Razón opera sobre cosas, proposiciones, ideas, la razón toma información y crea conocimiento, mientras que la Fe da el salto directo, sin todo ese proceso, a aceptar una idea como algo verdadero o real. Es un tipo de conocimiento, que se salta los pasos de la razón.

Para este trabajo no se entenderá la Fe en relación a los dogmas que están en clara contraposición con el A:. R:.


Sobre la Fe


En general, se piensa que la Fe es propia de una facultad espiritual, que pone al razonamiento o inteligencia al servicio de un ideal religioso, moral o filosófico. Pero si se observa la Fe como una fuerza del espíritu, se le podría considerar como las ondas, o los campos electromagnéticos o los rayos cósmicos, algo que está entre lo material y espiritual, y en consecuencia, algo que puede llevar a resultados materiales.[7]

La Fe no es creer en lo que no se ve y existe[8], como la Energía Oscura o la Materia Oscura. La Fe, consiste en creer en lo que no existe[9]. Esto último significa que creamos algo en el espíritu, que es inmortal, y esto hace inmortal a lo creado[10]. Entonces, la Fe cree y crea algo que no existía anteriormente en el espíritu.

La Fe, es algo profundo, tan grande y valiosa que no está ni puede estar sujeta o condicionada a demostraciones físicas, científicas o racionales de uno o más hechos.[11]

La Fe, no necesita de hechos ni maravillosos, ni científicos, ni razonados.[12]

La Fe, se alimenta de la duda, así como la vida se alimenta de la muerte y la luz de las tinieblas.[13]

La Fe es sutil, es espiritual, es de una vibración tal que traspasa todos los cuerpos que constituyen la personalidad humana, para hacerlos vibrar con la materia, con el espíritu, con la vida, con la muerte, con el Amor, con el odio, con TODO.[14]


Sobre Razón y sus límites


El evangelio de San Juan comienza con la afirmación[15]:
“Al principio existía la Palabra,
y la Palabra estaba junto a Dios,
y la Palabra era Dios.
Al principio estaba junto a Dios”
Juan 1:1-2

En la filosofía escolástica el entendimiento es Don de Ciencia, así como el fin de la razón son las verdades temporales, el fin del entendimiento son las verdades eternas e inmutables, en términos prácticos el don de ciencia es pensamiento progresivo y sus características son la precisión y la exactitud.[16]

En la filosofía escolástica hay dos tipos de sabiduría o dos vías de acceso a la “cabeza de las ciencias”, la que surge de la experiencia (sabiduría humana) y la que surge de la inspiración divina (palabra de Dios), por esto la sabiduría es tanto ciencia (conocimiento de los medios correctos para vivir) como don espiritual (amor por la verdad y la virtud).[17]

Entonces el A:. R:., el camino de la Razón, está incompleto o es imperfecto para alcanzar la Sabiduría Plena, aunque es cierto que se puede aproximar a ella y tal vez en el infinito converger a ella, pero el hombre, que carece del don espiritual del amor a la verdad y la virtud, necesita de la Fe, para crear ese puente que le falta y alcanzar la Sabiduría.

Escuadra y Compás


Al respecto Magister[18] nos dice: “… La Escuadra es, pues, otro símbolo de la crucifixión o división del Espíritu en la Materia, una esclavitud aparente de la cual debe librarse rectificando y dirigiendo hacia el centro todos sus esfuerzos.”, es decir nos habla de la Razón y el A:. R:. Luego continúa: “El ángulo recto es también el símbolo de la lucha, de los contrastes y de todas las oposiciones que reinan en el mundo sensible, de todas las desarmonías exteriores, que deben enfrentarse y resolverse en la armonía que viene del reconocimiento de la Unidad interior. Y el Compás es el símbolo de este reconocimiento y de esta armonía, que debe juntarse con la Escuadra y dominar el mundo objetivo por medio de la comprensión de una Ley y de una Realidad Superior: con su ángulo de 60° grados, en el cual se halla ordinariamente dispuesto (el ángulo del Triángulo Equilátero – el equilibrio entre Pensar, Sentir y Actuar –[19]), muestra el Ternario Superior que debe dominar sobre el Cuaternario Inferior, ósea el perfecto dominio del Cielo sobre la Tierra.” Y esto, a mi entender nos habla de la Fe, Fe en esa Realidad Superior y Fe en ese domino del Cielo sobre la Tierra, pero que en el Masón debe traducirse en un perfecto equilibrio.



Reflexiones Finales


P
odemos ver que existe un hilo conductor que se pierde en la Historia y que vincula a la F:. M:. U:. con los Antiguos Misterios, más exacto aún, con los llamados Misterios Menores y los Misterios Mayores, y podemos ver así que la F:. M:. U:. va más allá del A:. R:. y converge hacia el G:. A:. necesario para completar la G:. O:.

El propósito de ser masones es desbastar nuestra P:. B:., pero esto se debe hacer de forma Equilibrada para no anular o destruir la “piedra”. Entonces la mesura es fundamental, el equilibrio es necesario, del mismo modo en que se entrelazan la Escuadra y Compás en los diversos grados de nuestro R:. E:. A:. A:.

Fe y Razón, no se oponen, se necesitan en Equilibrio, para no caer en el pecado de la hibris (desmesura) de los antiguos griegos, y así llegar algún día a ser verdaderos francmasones.

Update: a la vista de los últimos acontecimientos sociales, civiles y políticos en Chile, que por coincidencia o sincronismo han ocurrido justo antes de la presentación de esta Plancha, puedo señalar que ahí dónde la Razón pareciera no encontrar una fácil solución, la Fe permite aunar a todas las voluntades en un mismo fin, y así podemos renovar nuestra esperanza de que después de la tormenta viene la calma y que luego de la noche más oscura vuelve a levantarse el Sol. Fe y Razón son necesarias para que todos podamos volver a ser hermanos de corazón.

S:.F:.U:.
Leída la plancha V:.M:.


Bibliografía


Referencia
Detalle
Autor
1
Lecciones de la Divinidad para un Mundo Actual
Sergio Salinas Cañas, Jaime Galté y Mr. Lowe
2
https://gnosisespiritual.wordpress.com/

3
Diccionario de la Lengua Española – Décima Edición
RAE
4
Manual del Aprendiz
Magister
5
Nueva Enciclopedia de la Masonería
Arthur Edward Waite



[1] Véase la Referencia 1, Capítulo 2.1 Sobre la Fe.
[2] Véase la Referencia 1, Capítulo 2.1 Sobre la Fe.
[3] Véase la Referencia 3.
[4] Véase la Referencia 5, Fe, Esperanza y Caridad.
[5] Véase la Referencia 5, Fe, Esperanza y Caridad.
[6] Véase la Referencia 3.
[7] Véase la Referencia 1, Capítulo 2.1 Sobre la Fe.
[8] Véase la Referencia 1, Capítulo 2.2 ¿Qué es la Fe?
[9] Véase la Referencia 1, Capítulo 2.2 ¿Qué es la Fe?
[10] Véase la Referencia 1, Capítulo 2.2.1 Reflexiones de la Fe.
[11] Véase la Referencia 1, Capítulo 2.2 ¿Qué es la Fe?
[12] Véase la Referencia 1, Capítulo 2.2.1 Reflexiones de la Fe.
[13] Véase la Referencia 1, Capítulo 2.3 Prueba de Fe.
[14] Véase la Referencia 1, Capítulo 2.4 Objetivo de la Fe.
[15] Sabemos que este texto es mucho más antiguo, adjudicándose incluso al propio Enoc.
[16] Véase la Referencia 2.
[17] Véase la Referencia 2.
[18] Véase la Referencia 4, capítulo “Escuadra y Compás”.
[19] Comentario del Autor de esta Plancha.

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